Como parte de nuestra filosofía, creemos que las cosas resultan mejor cuando se hacen en armonía con el medio ambiente y con la comunidad.
Por eso, desde el 2016, cultivamos nuestro cedrón de manera orgánica y biodinámica*: no usamos pesticidas ni transgénicos; usamos fertilizantes orgánicos en la medida justa y necesaria. Recolectamos, de los bosques nativos de la zona, hierbas que crecen naturalmente: el boldo, la ortiga, el toronjil cuyano, el poleo y otras, procurando un manejo sustentable de los bosques y la recolección de las hierbas para que se mantengan vivos y vivas.
También, para que las hierbas no pierdan sus propiedades, secamos a la sombra y a temperatura ambiente y cosechamos y envasamos a mano. Involucramos a la comunidad en nuestros procesos de cultivo, recolección, secado y envasado porque también son parte de nuestro proyecto.
*Actualmente estamos en el segundo año de los tres necesarios para la certificación.
Cosecha y recolección
Recolectamos y cosechamos las hierbas a mano porque así mantenemos la hoja de manera integral y evitamos la contaminación con pastos o tallos. La cosecha manual de cada hierba es un proceso que requiere concentración, paciencia y dedicación.
El cedrón lo cosechamos al final del verano. Las otras hierbas las recolectamos a lo largo del año, procurando sacar un número de hojas que vigorice el crecimiento de los árboles y hierbas y al mismo tiempo permitan un manejo del bosque que mejore su sustentabilidad y sea más fuerte ante riesgos ambientales como incendios o stress hídrico por falta de agua.
Cultivo
Tenemos 2,6 hectáreas de cedrón que cultivamos de manera orgánica biodinámica* en un rincón privilegiado de la sexta región, con acceso a agua limpia y aislados de cultivos convencionales. El sistema de cultivo biodinámico es armonioso con el medioambiente (combinamos el cultivo con hierbas complementarias en términos de nutrientes, no usamos pesticidas ni fertilizantes sintéticos y mantenemos un mantillo para proteger la tierra). Aprovechamos nuestras ovejas y alpacas para abonar la tierra con su estiércol y desmalezar para mantener los cultivos bajo control y aprovechamos la sinergía de insectos naturales para controlar pestes, lo que nos evita usar herbicidas y pesticidas.
* Estamos en el segundo año de los tres para obtener la certificación.
Secado y envasado
Para mantener la integridad de aromas y propiedades de las hojas, secamos todo a la sombra y a temperatura ambiente. El clima seco de la zona y el viento son especiales para el secado porque no se humedecen las hojas.
Envasamos todo a mano, porque con máquinas se cortan y se contaminan las hojas.
Secar y envasar así es más lento, sí, pero preferimos hacer las cosas bien para que la belleza y fuerza de las plantas lleguen enteras a tí.
